El Tribunal Colegiado de Sánchez Ramírez condenó este lunes a 30 años de prisión a Ammy Hiraldo Peña, encontrada culpable del asesinato de la joven Yennely Andreyna Duarte, ocurrido en marzo de 2024 en Cotuí.
El fallo pone fin a un proceso judicial que estuvo marcado por retrasos y que motivó protestas constantes de familiares y allegados de la víctima
Durante varias semanas, los parientes de Duarte se manifestaron frente al Palacio de Justicia de Cotuí, exigiendo el avance del juicio y la imposición de la pena máxima.
Finalmente, el tribunal acogió la solicitud del Ministerio Público, representado por el fiscal Francis Valerio, quien destacó que las pruebas presentadas demostraron de manera irrefutable la responsabilidad penal de la acusada.
De acuerdo con la investigación, Hiraldo Peña habría planificado el crimen, siendo captada por cámaras de seguridad comprando amoníaco y otros.
Detalles del caso
La victima, de 18 años, fue encontrada en una finca del distrito municipal Quita Sueño con multiples heridas cortas y punzantes, hecho que causó profunda indignación en la provincia. Tras cometer el crimen, la acusada habría utilizado una jeepeta familiar para trasladarse y posteriormente se entregó a las autoridades, admitiendo los hechos y alegando motivos pasionales
Pese a la sentencia, los familiares de Yennely Duarte insisten en que la investigación continúe para determinar si hubo otras personas vinculadas. El Ministerio Público confirmó que mantiene líneas de investigación abiertas.
Ejecución de la pena
Ammy Hiraldo Peña deberá cumplir los 30 años de prisión en un centro penitenciario de la provincia Sánchez Ramírez.
Para la familia de la víctima, la condena representa un paso importante hacia la justicia, aunque reiteran su exigencia de esclarecer por completo el caso.

