WASHINGTON.- El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó una orden ejecutiva que impone nuevos aranceles a decenas de países, que entrarán en vigor en siete días, plazo que se ha retrasado una semana para poder actualizar el calendario arancelario.
Para muchos, la subida de aranceles no es una sorpresa, ya que el presidente republicano la anunció inicialmente en abril. Trump había fijado un arancel mínimo del 10% a todos los países del mundo y gravámenes adicionales a decenas considerados los peores infractores, alegando déficits y prácticas comerciales desleales con Estados Unidos.
El presidente estadounidense retrasó varias veces el plazo de aplicación de los aranceles, apodado Día de la Liberación, dando a los socios comerciales la oportunidad de negociar. Algunos de ellos pudieron negociar un acuerdo e incluso alcanzar pactos de reducción arancelaria.
Una tasa arancelaria del 15% para la UE
Por ejemplo, se decidió una taza arancelaria del 15% para la UE después de que la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, llegara a un acuerdo político con Trump el domingo.
Algunos países, sin embargo, no pudieron negociar, lo que les inyectó una nueva dosis de incertidumbre. Y para algunos, se pusieron en marcha aranceles más altos de lo prometido inicialmente.
Brasil, con aranceles del 50% sobre sus bienes importados, y Canadá, con el 35%, están entre los más afectados, seguidos del 39% para Suiza, el 25% para India y el 20% para Taiwán. Trump emitió una orden separada para Canadá, estableciendo un aumento de los aranceles del 25% al 35%, citando el flujo transfronterizo de fentanilo.
El anuncio de la Casa Blanca a última hora del jueves decía que Canadá no había «hecho más para arrestar, incautar, detener o interceptar de otro modo… a traficantes, criminales en libertad y drogas ilícitas.»