Los Gigantes vuelven a estar a las puertas de la corona y lo hacen tras ganar un partido donde aplicó la máxima que Terris McDuffie patentizó a mediados del siglo pasado: “La hit no gana juegos”.
La novena nordestana, con solo tres muy oportunos imparables, derrotó este viernes a las Estrellas Orientales por 5-3 en el estadio Julián Javier y colocó la serie final 3-1 a su favor.
Kelvin Gutiérrez pegó un doble remolcador de dos vueltas y luego un cuadrangular solitario. El otro imparable fue un sencillo productor de Henry Urrutia, pero los cibaeños capitalizaron ocho boletos que recibieron para fabricar las carreras necesarias del triunfo.
Desde el montículo, Enny Romero tiró cinco entradas de solo dos hits, una vuelta, dos bases y dos ponches para acreditarse el triunfo. Entonces llegó un comité de cinco relevistas para completar el trabajo. Del lado petromacorisano, Rony García solo fue dos capítulos y un tercio de cuatro boletos y una anotación. Salvó Juan Minaya.
El quinto partido tendrá lugar este sábado 22 en el estadio Tetelo Vargas de San Pedro de Macorís a partir de las 7:30 pm. Los del Jaya tienen una corona en sus 25 años de historia, lograda en la 2014-2015, en sus cinco visitas a la final.
Solo las Águilas Cibaeñas, en la temporada pasada ante los Gigantes, y el Escogido en la 1987-88 contra las Estrellas, han regresado para ganar una serie final cuando han caído debajo 1-3.
No pudieron las Estrellas sacar provecho a siete incogibles. Se fue de 5-2 con hombres en posición de anotar y dejó a cinco en circulación. Gustavo Núñez fue el mejor al palo con jonrón y sencillo en cuatro turnos.
