Santo Domingo.-El Partido Reformista Social Cristiano (PRSC) advirtió que la República Dominicana enfrenta uno de los retos más trascendentales de su historia reciente: la preservación del medio ambiente y la sostenibilidad de los recursos hídricos, aspectos que considera claves para el desarrollo económico, la estabilidad social y la gobernabilidad democrática.
Al referirse al tema, el presidente del PRSC, Federico ‘Quique’ Antún Batlle, afirmó que, debido a la condición insular del país y su alta vulnerabilidad frente a los efectos del cambio climático, la protección ambiental debe asumirse como una prioridad nacional y una política de Estado de largo plazo.
Protección ambiental como política de Estado
“El cuidado del medio ambiente no es solo una responsabilidad moral, sino una necesidad estratégica para garantizar el futuro de la nación. Sin recursos naturales protegidos no puede haber desarrollo sostenible ni bienestar para la población”, expresó el dirigente reformista.
Antún Batlle señaló que, aunque la República Dominicana cuenta con importantes fuentes de agua en comparación con otros países del Caribe, estos recursos enfrentan presiones crecientes por la deforestación de las cuencas altas, la contaminación industrial y doméstica, la expansión urbana desordenada y la sobreexplotación de los acuíferos.
Deterioro de ríos emblemáticos
Advirtió que ríos emblemáticos como el Yaque del Norte, el Yuna y el Ozama muestran un progresivo deterioro, evidenciado en la reducción de sus caudales, la sedimentación excesiva y altos niveles de contaminación, lo que constituye una seria amenaza para el abastecimiento de agua potable, la producción agrícola y la salud pública.
Ante este panorama, el líder del PRSC consideró impostergable fortalecer una visión integral de la gestión del agua, que incluya medidas de conservación, regulación efectiva, monitoreo permanente y una sólida política de educación ambiental.
Compromiso nacional y gestión integral
Asimismo, enfatizó que la protección del medio ambiente exige un compromiso nacional que involucre de manera articulada al Estado, al sector privado y a la ciudadanía.
“La República Dominicana posee un patrimonio natural invaluable, integrado por parques nacionales, áreas protegidas, cordilleras, manglares, humedales y una rica biodiversidad. Sin embargo, la presión humana ha provocado degradación de los bosques, pérdida de hábitats críticos y contaminación de suelos y mares”, subrayó.
Ecosistemas y servicios ambientales
Antún Batlle, quien ofreció estas declaraciones al responder preguntas de periodistas en la sede del PRSC, indicó que la conservación de estos ecosistemas es vital para garantizar servicios ambientales esenciales, como la regulación del clima, la prevención de inundaciones y la recarga natural de los acuíferos.
En ese sentido, abogó por la modernización de las instituciones ambientales y el fortalecimiento del cumplimiento efectivo de las leyes vigentes, así como por la promoción de prácticas productivas sostenibles que reduzcan la contaminación y fomenten el uso eficiente del agua y la energía.
Ordenamiento territorial y educación ambiental
También destacó la importancia del ordenamiento territorial para evitar ocupaciones ilegales en zonas protegidas y frenar el deterioro ambiental derivado del crecimiento urbano descontrolado.
Finalmente, hizo un llamado a convertir la educación ambiental en un eje transversal del sistema educativo y a promover una cultura ciudadana basada en el respeto y la responsabilidad hacia los recursos naturales.
“Preservar el medio ambiente y los recursos hídricos no es una opción, es una obligación para garantizar la salud, la calidad de vida y el futuro de todos los dominicanos. La sostenibilidad ambiental es la base del desarrollo y de una democracia sólida”, concluyó.
