Transcurridas más de 32 horas del terremoto en Afganistán, los heridos y los muertos continúan apareciendo.
Aún hay personas atrapadas entre los escombros y el acceso de los equipos de rescate a las zonas montañosas sigue siendo extremadamente difícil.
Mientras el reporte oficial más reciente del lunes hablaba de 800 fallecidos, la Media Luna Roja Afgana actualizó la cifra este martes y la elevó a 1.124 víctimas mortales.
Una fila de ambulancias transita la carretera montañosa intentando llegar a las aldeas de Kunar, mientras helicópteros llevan suministros de ayuda y trasladan heridos a hospitales.
El desastre pone presión a la administración talibán, ya debilitada por la fuerte caída de la ayuda extranjera.